De la vida y milagros de Enric Castellà prácticamente no se sabe nada. Por las difusas pistas que dejó, se puede afirmar que se dedicó al reporterismo gráfico a principios del siglo XX y durante una década, entre 1905 y 1915. Fue uno de los fotoperiodistas más activos en Barcelona, miembro destacado de una prolífica generación de fotógrafos que rompió con la tradición del retrato de estudio para orientarse a la imagen de actualidad.

No se ha podido documentar su lugar de procedencia, ni tan siquiera la fecha de nacimiento o cuándo murió el fotógrafo Enric Castellà. A parte de su trabajo publicado, un dato lo confirma como reportero gráfico: en 1909 fue uno de los fundadores de la Associació de la Premsa Diària de Barcelona, de la cual solo él y los fotógrafos Frederic Ballell, Josep Badosa y Josep Brangulí formaron parte desde el inicio.

Las primeras fotografías de prensa firmadas que hemos localizado hasta ahora, las publicó en el semanario La Ilustración Obrera, donde empezó a colaborar en junio de 1904. Primero mensualmente y, desde finales de septiembre, cada semana.

A partir de 1905 diversifica su trabajo. Fue jurado del concurso fotográfico sobre el eclipse organizado por la Real Sociedad Colombófila de Cataluña y por primera vez consta como el representante en Barcelona de La Fotografía: revista mensual ilustrada, editada por la Sociedad Fotográfica de Madrid. Durante aquel año colaboró esporádicamente en la revista madrileña Nuevo Mundo y en las barcelonesas La Hormiga de Oro y El Mundo Científico. También inició dos trabajos más estables, en Vida Marítima hasta 1912, y en Ilustración Artística hasta 1915.

En los meses de mayo y junio de 1906 el fotógrafo firmó imágenes de actualidad en Cu-Cut!. Al año siguiente, Castellà empieza a colaborar en la prestigiosa La Ilustración Española y Americana, hasta el 1912, y también debuta como firma en Hojas selectas.

Fue en verano de 1909 cuando le llegó el máximo reconocimiento gracias a las fotografías sobre la Semana Trágica que publicó en La Actualidad. Ya hacía dos años que trabajaba en el semanario y continuó hasta 1914. Por la cantidad de imágenes y la regularidad de publicación se puede afirmar que era su fotógrafo principal.

Enric Castellà  es el autor de la imagen emblemática y más conocida de la Semana Trágica, la panorámica general de la ciudad de Barcelona en llamas tomada desde la montaña de Montjuic, publicada el 28 de agosto de 1909 en el semanario.  En octubre también retrató el juicio a Francesc Ferrer Guàrdia.  Al año siguiente, en el número conmemorativo de julio, La Actualidad volvió a publicar sus imágenes: en portada y a doble página interior coloreándolas, y dos páginas más en blanco y negro.

Des de 1909 hasta 1913 colaboró en La Unión Ilustrada, la revista gráfica andaluza más importante de la época, editada en Málaga. El último rastro del reportero de actualidad se sitúa en 1915 en Ilustración Artística. A partir de  julio la firma Castellà se incorpora a la revista madrileña La Esfera para dedicarse a retratar monumentos artísticos, especialmente de Andalucía, hasta 1919.
 
Solamente hemos podido localizar una parte muy pequeña de su obra en el Arxiu Fotogràfic de Barcelona, en el Arxiu Nacional de Catalunya y en manos de coleccionistas privados.